Mi amiga Luchi me ha traído una tarta de su pueblo. Ella es de Suances (Cantabria) y, siempre que puede, hace patria. En esta ocasión me ha enviado una tarta de hojaldre como no he comido en mi vida. En Cantabria, esto del hojaldre es casi una religión. De hecho, Jacinto Romanos, el pastelero que elabora esta maravilla, pertenece a la Cofradía del Hojaldre, que todos los años celebra su capítulo en Torrelavega, donde se organiza una fiesta por todo lo alto.
El hojaldre que sale del obrador de Jacinto Romanos es un hojaldre crujiente, como mandan los cánones, que se va alternando, en capas, con un delicioso relleno cremoso de mantequilla. Encima se le espolvorea con mantequilla y almendra molida. (Siento no tener una foto del hojaldre. Nos lo comimos antes de darme cuenta)
Lo podéis comprar en la Confitería Romanos, que está en la calle Ceballos nº 9, en Suances. Comprendo que no es lo mejor para luego ponerse bañador, pero, si este verano viajáis por el Norte, sería un pecado, sin absolución posible, pasar de largo de estos suculentos hojaldres. Imprimir
El hojaldre que sale del obrador de Jacinto Romanos es un hojaldre crujiente, como mandan los cánones, que se va alternando, en capas, con un delicioso relleno cremoso de mantequilla. Encima se le espolvorea con mantequilla y almendra molida. (Siento no tener una foto del hojaldre. Nos lo comimos antes de darme cuenta)
Lo podéis comprar en la Confitería Romanos, que está en la calle Ceballos nº 9, en Suances. Comprendo que no es lo mejor para luego ponerse bañador, pero, si este verano viajáis por el Norte, sería un pecado, sin absolución posible, pasar de largo de estos suculentos hojaldres. Imprimir
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