17 de octubre de 2018

Pastel de queso y chocolate blanco

ingredientes
6 huevos, 240 g de queso crema, 240 g de chocolate blanco (40 g de queso crema y de chocolate blanco por cada huevo), azúcar glas.

elaboración 
  1. Precalentamos el horno a 170º 
  2. Derretimos el chocolate al baño María y lo batimos con el queso. 
  3. Incorporamos las cremas y batimos fuerte hasta que todo el conjunto quede bien esponjoso y blanqueado. 
  4. Con delicadeza, juntamos con las claras a punto de nieve. 
  5. Ponemos agua en la bandeja del horno y sobre ella un molde con la preparación que hemos realizado. Horneamos durante 15 minutos. 
  6. Pasado este tiempo, bajamos la temperatura a 150º-160º y horneamos otros 15 minutos. 
  7. Apagamos el horno y dejamos que repose dentro otros 15 minutos. 
  8. Espolvoreamos con azúcar glas. 
Podemos hacer el pastel tanto en un molde alto como bajo. Si es en este último, podemos cortar en pequeños pastelillos ayudándonos de moldes cortapastas.
 
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16 de octubre de 2018

El increíble espectáculo de Katz’s


Dicen que está lleno hasta los topes desde que abrió sus puertas hace 130 años. Puede ser una exageración, pero el día que yo fui tuve que esperar unos minutos hasta llegar a uno de los siete habilísimos cutters que preparan los suculentos sándwiches “king size” de Pastrami que sirven en Katz’s.
Katz’s, en Nueva York, es el templo del pastrami, esa carne puesta en salmuera y ahumada, de tradición judía, que encanta a los habitantes de la gran manzana.
Como la Puerta de Alcalá, allí está viendo pasar el tiempo, en una esquina del Lower East Side, desde 1888, o sea, desde sólo un año después que la Estatua de la Libertad y cuarenta antes que el Empire State.
El viejo luminoso de neón, siempre luciendo, te guiará para encontrarlo. Nada más entrar, una jovencita te da un tiket en el que, en el mostrador o en la mesa, te irán apuntando la cuenta para pagar a la salida. Es el pasaporte (no lo pierdas) que da acceso a una enorme sala, toda luces, ruido y ajetreo, donde, inevitablemente, tendrás que hacer cola para acceder a uno de los siete cortadores que, en un pis pas, te habrá loncheado la carne y preparado un impresionante sándwich con pan de centeno. Lo acompañan con unos pepinillos jumbo. Ahora toca buscar mesa. Aunque, como digo, el local está lleno a todas horas, es tal la rotación de clientes que no es difícil encontrar pronto una mesa, muchas veces compartida (¿Le importa que me siente?) con otras personas. Los mitómanos buscarán la de Meg Ryan; allí fingía el famoso orgasmo de Cuando Harry encontró a Sally.  
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Marcando el lugar, cuelga del techo un círculo azul en el que puede leerse: “Where Harry met Sally… hope you have what she had!"… ¡Ojalá tengas lo que ella tuvo! !Disfruta!
No tuvimos suerte de ver el espectáculo, aunque cuentan los camareros que a veces hay quien se anima a reproducir la escena entre los aplausos o abucheos del público, según resulte la actuación.
Aunque la película puso a Katz’s en el mapa y, de paso, lo llenó de turistas, hasta allí se va por el pastrami y, realmente, merece la pena Una carne roja, con una costra ennegrecida, olor ahumado y un rico sabor de las especias que han utilizado en la salmuera que le dan su toque especial. ¡Ojo!, no es jugosa: la carne para el pastrami se prensa antes para sacarle los jugos. Pero nadie se fijaría en ello de lo rica que está.
A pesar de todo, cuesta acabar el enorme sándwich que, según dicen, no es de los más grandes que puedes tomar en Nueva York, una ciudad que adoptó el pastrami como uno de sus platos emblemáticos. En Katz’s venden 7000 kilos a la semana de esta delicia que en España apenas es conocida, pero que tiene su nombre castellano: pastrón. Así lo llaman en Buenos Aires, otra ciudad donde es muy apreciado desde su introducción por la numerosa colonia judía.
Habrá que ir a comprobarlo. Mientras tanto, al salir de Katz’s no te olvides de presentar el tiket y pagar. Si no hubieras tomado nada, debes entregarlo en blanco. Perderlo, como te avisan en la puerta, te costará 50 céntimos. Y no te hagas la lista, que los camareros saben lo que has comido.
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Katz's
205 E Houston St, New York
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3 de octubre de 2018

Crema de guisantes con su ravioli

ingredientes 
1 litro de caldo de verduras, 500 g de guisantes congelados 

Ravioli 
Tocino ibérico en lonchas finitas (2 lonchas por comensal), guisantes crudos congelados extrafinos

preparación
  1. Ponemos el caldo a hervir, le incorporamos los guisantes, dejamos que vuelva hervir y apagamos.
  2. Trituramos todo muy bien en un vaso americano y lo pasamos por un pasapuré, chino o colador de malla fina, poniendo cuidado de que no queden grumos. 
  3. Con el tocino hacemos un pequeño paquetito del tamaño de un buen ravioli y lo rellenamos de guisantes crudos (1 c.c. por cada ravioli). 
  4. Ponemos los raviolis en una fuente de horno. A la hora de comer, los metemos en un horno a 200º hasta que el tocino se vuelva transparente. 
  5. En cada plato, colocamos un ravioli y, ya en la mesa, vertemos sobre él el caldo con una jarrita. 
  6. Junto al ravioli se pueden poner uno o dos langostinos a la plancha y una hojita de menta.
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Hamburguesa de pato

ingredientes 
(para 25 o 30 mini hamburguesas o 6-8 grandes) 
3 magrets de pato, 2 huevos, 75 g de galletas crackers, perejil, sal y pimienta 
Cebolla frita y lechuga 
Panecillos de hamburguesa

preparación
  1. Picamos los magrets a cuchillo, dejando la grasa (si tiene mucha, se puede quitar un poco) 
  2. Añadimos las galletas crackers, bastante trituradas con la mano, el perejil, los huevos, sal y pimienta. Amasamos y dejamos reposar la masa en la nevera, al menos, durante 30 minutos. 
  3. Tomamos pequeñas porciones (como una albóndiga grande) que aplastamos con la mano y hacemos a la plancha. 
  4. Ponemos cada filetito en una pan de hamburguesa partido por la mitad y tostado un poco, y añadimos lechuga y cebolla frita. Cerramos y clavamos con un palillo para que no se desmorone.
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Pastelillos de garbanzos


ingredientes
230 g de garbanzos cocidos, lavados y escurridos, 200 g de azúcar, 4 yemas, ½ c.c. de canela, la ralladura de ½ limón, 500 g de hojaldre. 
Mantequilla para engrasar y azúcar glas para espolvorear.

preparación
  1. Engrasamos con mantequilla los moldes de los pastelillos. 
  2. Estiramos el hojaldre, cortamos círculos del tamaño que necesitemos y forramos los moldes con ellos. Con la batidora, trituramos los garbanzos, las yemas, el azúcar, el limón y la canela (Si estuviera demasiado espeso y no pudiéramos trabajar con la batidora, podemos añadir un chorrito de leche o nata) 
  3. Rellenamos los moldecitos con esta masa. 
  4. Horneamos a 180 entre 20 y 25 minutos. 
  5. Espolvoreamos con azúcar glas.

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2 de octubre de 2018

Nueva York o el arte de comer en la calle

Es muy caro comer en un restaurante de tipo medio en Nueva York. Al menos para el bolsillo de una española media. Me refiero a un restaurante con mantel, vajilla que no sea de plástico y camarero, al que además hay que premiar, sí o sí, con una propina que aquí provocaría reverencias de agradecimiento que harían ruborizarse al donante.
Sin embargo, no conozco ninguna ciudad en la que sea tan fácil comer algo fuera de casa a precios razonables. Hay miles de opciones y siempre alguna cercana.

La más socorrida son los Deli’s, esos abigarrados locales que proliferan por toda la ciudad, especialmente en las esquinas, y en los que uno puede comprar, a cualquier hora, unos sándwiches, fruta, zumo y un café con tapa, de esos aguados que tanto gustan allí, y salir a comerlo todo al parque más cercano. En cualquier parque las mesitas y sillas de terraza son propiedad de la ciudad y por tanto uno se puede sentar libremente sin que ningún camarero te inste a consumir algo. Si se elige esa opción, mejor no tomar cerveza. Desde hace 2 años, ya no es delito consumir alcohol en público, pero sí se considera falta y puede acarrear una multa de la policía.

Otra posibilidad, los foodtruck. Los hay de todas las especialidades: desde el típico perrito caliente, tan americano, hasta la fajita mejicana, pasando por el falafel o un kebab turco, con productos que reúnen las bendiciones de la carnicería halal; casi todo se puede encontrar en estos pequeños carromatos de abigarrada decoración, casi siempre gestionados por inmigrantes.

Los supermercados pueden ser otra buena opción. La mayoría tienen secciones muy surtidas de productos calientes, cocinados en el acto o ya listos para consumir, con los que una puede confeccionarse fácilmente un estupendo menú, siempre que no sea un poco indecisa, porque la variedad de caldos, guisos, frituras o asados suele ser tan grande, que lo difícil es la elección. La mayoría de los supermercados suelen tener una zona para consumir lo que se ha comprado y, de hecho, en las puertas se anuncia como un atractivo más de las tiendas. Lo tienen por ejemplo en Whole Food, una cadena de tiendas de bastante calidad y surtido apabullante, que acaba de ser absorbida por Amazon. Quizá lo peor es la lentitud con que se gestiona la cola de las cajas, causa de que a veces la comida llegue fría a la sala donde se puede consumir.
También abundan los restaurantes de comida rápida, tipo autoservicio, donde todo se puede tomar recién hecho o, al menos, recién calentado. Y no estoy hablando del McDonals. Me sorprendió que vi muy pocos de estos locales, que aquí identificamos con la comida rápida. Sí hay muchas pizzerías, pero suelen ser locales pequeños que, eso sí, ofrecen unas pizzas gigantescas, con los ingredientes más variados y originales que se pueda imaginar, incluyendo los clásicos.

No obstante, para probar la cocina italiana durante los días que he estado allí, lo mejor era la Little Italy, que celebraba a San Genaro por todo lo alto, con más de un kilómetro de calle de terrazas y humeantes puestos de comida italiana, donde se podía comprar, por ejemplo, la riquísima sfogliatella de la foto..

Todo el mundo sabe que no hay cocina que se venda mejor que la italiana; pues bien, junto al edificio Flatiron, uno de los iconos de Nueva York, se ha instalado una enorme galería donde se puede degustar o comprar lo más selecto de la cocina italiana, desde la pasta fresca a los canoli, pasando por las más selectas mortadelas o los vinos más exquisitos. Se llama Eataly y sus laberínticas galerías están llenas a todas horas y las barras de sus restaurantes atestadas.
En el fondo es una vuelta de tuerca en ese fenómeno que aquí tiene su mejor representación en el Mercado de San Miguel. En Nueva York, donde todo se hace a lo grande, el equivalente sería el enorme Chelsea Market, con restaurantes de todas las cocinas del mundo. O,  más elegante, en Dean & de Luca, una exquisita y concurrida tienda gourmet en el 560 de la avenida Broadway.
De Nueva York, sólo desde el punto de vista gastronómico, hay mucho más que contar. Habrá una segunda entrega.

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26 de septiembre de 2018

Judías verdes en fritura

ingredientes
¼ kg de judías verdes, harina, agua, hielo, sal y aceite de girasol

preparación
  1. Partimos longitudinalmente las judías verdes y las dos medias vainas resultantes las dividimos a su vez en dos o tres trozos (los trozos deben de ser largos) 
  2. En un bol, mezclamos la harina, la sal y el agua (muy fría) poco a poco, hasta que la mezcla adquiera la consistencia de unas natillas claritas. 
  3. Le ponemos algún cubito de hielo para que no se caliente. 
  4. Rebozamos las judías en la masa, y vamos friéndolas en una sartén profunda. 
  5. Acompañamos con una mayonesa, en la que, si se quiere, se puede añadir curry.
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Escabeche de pollo de corral a la naranja

ingredientes 
1 pollo de corral cortado en octavos, 2 cebollas grandes, 3 o 4 zanahorias, 4 dientes de ajo, 1 vaso de aceite y un poco más para el sofrito, 1 vaso de vinagre de buen vino, 1 vaso de vino blanco, 2 vasos de zumo de naranja. 
Sal, pimienta, laurel y perejil

preparación
  1. En un poco de aceite doramos el pollo, salpimentándolo. 
  2. Cortamos la cebolla en juliana gruesa y la zanahoria en trozos grandes, partimos los ajos por la mitrad y añadimos todo a la cazuela del pollo. 
  3. Incorporamos todos los líquidos, el laurel y una buena rama entera de perejil. 
  4. Cocemos suavemente, hasta que el pollo esté tierno. 
  5. Se puede hacer en una olla a presión (unos 20 minutos si se trata de una olla rápida)
Se puede tomar tanto frío como caliente.
 
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Lágrimas de fruta con tortitas

ingredientes
Fruta: kiwi, fresas, piña, manzana, melón, plátano, uvas...
Nata montada
 
Tortitas
200 g de harina, 1 c.c. de sal, 3 c.c. de levadura química, 1 c. s. de azúcar, 1 c.s. de mantequilla, 2 huevos, 1 vaso grande de leche fría.
Mantequilla para engrasar la sartén.
 
Salsa de chocolate
200 g de chocolate negro, 200 g de nata líquida
 
Palos de brocheta
 
elaboración
  1. Partimos la fruta (mejor si es colorida) en trozos de buen tamaño para insertar en el palo de la brocheta y que sean de “bocao”.
  2. Con la túrmix, mezclamos los ingredientes de las tortitas y dejamos que la masa repose 30 minutos.
  3. Calentamos la nata de la salsa y, con el fuego apagado, echamos el chocolate troceado para que se funda con el calor.
  4. En una sartén antiadherente untada con mantequilla, vamos echando pequeñas porciones de la masa de las tortitas. Nunca deben quedar mayores que el diámetro de una mandarina: del tamaño de una nuez serían perfectas.
  5. Montamos las brochetas, alternando frotas y tortitas como nos parezca mejor.
  6. En el plato, ponemos nata montada, encima la brocheta y, sobre ella, unos cordones de la salsa de chocolate.
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24 de septiembre de 2018

Programa para el cuatrimestre (septiembre 2018 - febrero 2019)


01 Judías verdes en fritura
     Escabeche de pollo de corral a la naranja
     Lágrimas de fruta con tortitas
26, 27 y 28 de septiembre

02 Crema de guisantes con su ravioli
     Hamburguesa de pato
     Pastelillos de garbanzos
3, 4 y 5 de octubre

03 Tortilla japonesa a mi manera
     Lubina frita con patatas cristal
     Pastel de queso y chocolate blanco
17, 18 y 19 de octubre

 04 Pan en la Pyrex
     Arroz negro de laterío
     Manzanas rellenas de natillas
24, 25 y 26 de octubre

05 Guarniciones elegantes (preparando la Navidad)
Ensalada de mango y frambuesas
Puré de coliflor y apionabo
Arroz con granada
Cuscús con limón
Salteado de quinoa con piñones
Espelta a las hierbas
7, 8 y 9 de noviembre

06 Aperitivos elegantes (preparando la Navidad)
     Galletas Oreo de aceitunas negras
     Crackers de bacon y parmesano
     Tostada de foie de pato y chutney de pera
     Tarama de huevas de bacalao
     Queso ahumado con romero
21, 22 y 23 de noviembre

07 Terrina de patatas de Martín Berasategui
     Manitas rellenas de foie con salsa de Pedro Ximénez
     Tronco de castañas
28, 29 y 30 de noviembre
   
08 Crema de zanahorias al aroma de cítricos
     Lomo navideño de cerdo con salsa de mostaza caliente
     Ravioli de mazapán
12, 13 y 14 de diciembre

09 Sopa de cebolla al cava
     Codornices en pepitoria, con yema
     Pirámide de cerezas al kirch
19, 20 y 21 de diciembre

10 Calabacines con calabaza
     Garbanzada de chorizo
     Crema portuguesa (sus natillas)
9, 10 y 11 de enero

11 Croquetitas de gulas al ajillo
     Tronco de tortilla de patatas con su relleno
     Tarta de nueces
16, 17 y 18 de enero
   
12 Almejas al horno con cherrys
     Patatas guisadas con gambones
     Cheesecake de dos chocolates
23, 24 y 25 de enero

13 Aguacate relleno de papaya
     Potaje de col
     Milhojas de arroz con leche y mandarina
30 y 31 de enero y 1 de febrero

14 Hojaldre de puerros y tetilla
     Callos de bacalao con mejillones
     Bizcocho blanco delicado
6, 7 y 8 de febrero


15 Lo mejor de nuestro blog
13, 14 y 15 de febrero